domingo, 6 de julio de 2008

Es posible



Inténtame otra vez
rompe compuertas
que tercamente clausuro
cada tres meses los días veintiuno
arrímate a mi nocturnidad sin límites
a este sonambulismo crónico
aparta a codos abiertos
la muralla de impenetrables lianas
desenreda el torbellino de ideas
pensamientos furtivos
persistentes y endémicos
libérame del ensueño feroz que me vulnera
cuando estoy desprovista de visiones
quiebra el cristal de aguas que me oculta
desnúdame de ropas y corazas
recuéstame en la orilla de tu playa pedregosa
y roza con los dedoscada centímetro de piel atormentada
arrodíllate a los pies de mi voz que no cesa
de poemizar emociones
rotundas y esporádicas
a la cuenta de tres vuélvete cielo, mar, espuma
vuélveme del revés
que en los bolsillos del alma aún guardo trocitos
de un papel desgastado y amarillo
con otra navidad de tiempos idos.
Todavía es posible dar vueltas a la luna
y vivir un verano en el invierno.

Progresión



El medio vaso que bebe
un día, y otro día, y otro
zumo, agua, café
le pesa cada vez
antes era hasta el borde
(rebosante de líquido)

ahora apenas pasa la media
y le pesa
cuando confundido advierte
que invariablemente sale el sol
un día
y otro día
y otro...


martes, 27 de mayo de 2008






dos manos surgen

desde el centro exacto

de la tormenta


y la conjuran

-herejía-

con una cruz de sal

y dos cuchillos

jueves, 3 de enero de 2008


Tu voz sin desniveles
gorgoteo de agua mansa
tu voz de plumas pardas
ave sin prisas
aleteo sutil
tu voz que abre caminos sin derrotero cierto
ajetreo de nubes
tu voz sin demarcaciones
sin contornos precisos
tu voz se pierde
en los suburbios calmos de mi oído
tu voz sin coartadas
apología de acuerdos
pacto de sonoridades
tu voz penetra y perpetúa acordes
rítmicos
constantes
se amodorra y extiende
preludia la continuidad
la tregua
el concierto
tu voz que esconde risas
sujetadas con cintas verdiazules
me acostumbra tu voz
me predispone al sueño
a la narcosis
tu voz me toma de la mano y me transplanta
al instante en que, de pronto
cerré los ojos
y bebí las palabras
sosteniendo el milimétrico segundo
en el que quise
sentir tu mano
tus dedos
dibujando un pájaro en mi pelo
tu voz, así, sin prisas
y el instante
absoluto
imborrable.


insaciable, el mar

se ha nutrido de palabras


el amor

desvaídopor la sal

es un alarido afónico

Nochevieja


fríofríofrío

pueblo bajo cero

llovió sin agua

anoche

la eternidad

en doce campanadas

año nuevo azul

pies sin calcetines

en las antípodas

suenan besos de campanas